Simposio 10: Nuevas aproximaciones a la vida cotidiana, prácticas funerarias y cronología de las comunidades alfareras del norte semiárido chileno: el sitio El Olivar revisitado

Coordinadores: Paola González & Aryel Pacheco.

El conocimiento acerca de las comunidades alfareras del norte semiárido chileno, durante los períodos Agroalfarero Temprano (PAT), Medio, Intermedio Tardío (PIT) y Tardío (PT), varía en profundidad en los diferentes valles de este territorio. En la medida en que la investigación sistemática de la prehistoria de estas comunidades avanza, ha resultado evidente la existencia de una importante diferenciación subregional. De igual modo, el aumento de dataciones absolutas realizadas en distintos sitios arqueológicos de este período, a menudo desafían estas grandes categorías cronoculturales y su utilidad para la comprensión de los procesos de continuidad y cambio cultural. Por otra parte, el estudio de las comunidades agroalfareras del valle de Elqui, se ha sustentado principalmente en la investigación sitios funerarios, sin embargo, la información contextual asociada a estos hallazgos es escasa o nula. Por esta razón, las posibilidades interpretativas acerca de la vida cotidiana y aspectos rituales en el ámbito de la muerte se han visto seriamente restringidas.

Un conjunto de características determinan la importancia del sitio El Olivar para la reconstrucción de la prehistoria de la Región de Coquimbo, particularmente del período agroalfarero. Entre ellas, su gran extensión espacial, profundidad temporal, riqueza y variedad de los contextos, densidad ocupacional, entre otros. Las ocupaciones prehispánicas descritas en el sitio, incluyen al denominado Complejo Cultural Las Ánimas y a la Cultura Diaguita, en todas sus fases, incluyendo el período de contacto con los Incas. También se han descrito conchales asociados a la cultura El Molle. Considerando estos antecedentes, se puede sugerir una profundidad temporal de, aproximadamente, ocho siglos de ocupación prehispánica para este asentamiento.

El sitio El Olivar posee una larga historia de investigación, la primera mención sobre su existencia, fue aportada por José Toribio Medina, a fines del siglo XIX, en su obra “Los Aboríjenes de Chile”. La primera excavación arqueológica sistemática fue realizada por el arqueólogo Samuel Lothrop, en 1929. El investigador excava 63 sepulturas (72 individuos humanos y un camélido) y cinco trincheras con depósitos habitacionales. Posteriormente, Slusser sistematiza los resultados de las excavaciones realizadas por Lothrop, a partir de sus diarios de campo y del estudio de la colección arqueológica recobradas. Francisco Cornely, realiza extensivas excavaciones en el sitio El Olivar, recuperando un gran número de objetos, principalmente alfarería. Desafortunadamente, la información contextual asociada a estos materiales fue muy escasa. Cornely excavó un total de 20 grupos de sepulturas, denominando estas áreas funerarias con letras alfabéticas, de la A hasta la U.

Investigaciones más recientes en el sitio El Olivar fueron realizadas por los arqueólogos Silvia Quevedo y Francisco Garrido, Carlos Ocampo, Gabriel Cantarutti y Gloria Cabello. Los investigadores recobran materiales diagnósticos del Complejo Las Ánimas, y las tres fases de la cultura Diaguita. Destaca el establecimiento de asociaciones estratigráficas y funerarias, que sugieren contemporaneidad entre prácticas mortuorias del complejo Las Ánimas (entierro con camélidos articulados) y la fase I de la cultura Diaguita.

Entre los años 2015 a 2017, a raíz de la construcción de la doble vía de la carretera panamericana, se realizaron extensas excavaciones arqueológicas en el sitio El Olivar, dirigidas por los arqueólogos Paola González y Gabriel Cantarutti. Se identificaron 8 áreas funerarias, 29 conchales y rasgos habitacionales, vinculados a restos materiales Ánimas y Diaguita. Destacando también el hallazgo de conchales Molle. El rescate arqueológico se concentró en dos áreas funerarias (FUN 6 y FUN 8). Estas labores permitieron recobrar y analizar 212 entierros primarios, 44 entierros secundarios, 56 camélidos articulados, 3 cánidos y una importante cantidad de material arqueológico. Las recientes investigaciones han abordado aspectos tales como cronología; vinculaciones genéticas; calidad de vida; relaciones de género; alimentación; prácticas mortuorias; arte visual; simbolismo y cosmovisión; manufactura cerámica, lítica y de metales; arqueobotánica y arqueofauna, entre otros. La información recobrada replantea la conceptualización de las comunidades Ánimas y Diaguitas como entidades culturales diferentes, al menos en este asentamiento prehispánico. Además, estas investigaciones aportan valiosos antecedentes sobre la vida cotidiana y ritual de esta comunidad.

Considerando estos nuevos antecedentes arqueológicos y bioantropológicos, el presente simposio persigue generar una instancia de reflexión, desde diferentes disciplinas y aproximaciones metodológicas y teóricas, en torno al sitio El Olivar. El estudio de este importante asentamiento prehispánico, de naturaleza habitacional y funeraria, resulta esencial para una mejor comprensión de los procesos de continuidad y cambio, así como de la forma de ser y estar en el mundo de las comunidades alfareras de la región de Coquimbo.

Presentaciones: